miércoles, 1 de octubre de 2008

PRIMERA VEZ

VIERNES 26 SEPTIEMBRE 2008

A las once nos recoge nuestra traductora para ir al orfanato, casa de niños lo llaman aquí.
Según nos acercábamos los nervios más nerviosos, después de la experiencia del día anterior el corazón late de nuevo rápidamente, no sabemos con lo que nos vamos a encontrar,…., una cosa es la foto y otra la realidad.

Esperamos mientras Zhanara habla con las doctoras, al salirnos comenta que hay un problema y que hasta esta tarde no podemos ver a la niña. ¡Ya empezamos de nuevo con los jueguecitos!. Nos dice que hay más niños del orfanato en el hospital, incluso 2 inválidos, y que necesitan un vehículo especial del que no disponen ahora, así que se acuerda que a las 4 de la tarde podemos volver a conocerla.
Volvemos a casa con los nervios peor aún, esto parece la historia interminable, ya hasta dudamos de que esa tarde podamos ver a la niña…, las tres horas se pasan en un sin vivir.

A la hora acordada volvemos a la casa de niños, al ver la entrada ya se nos disparan las pulsaciones ¿tendremos suerte esta vez, y por fin conoceremos a la más deseada?.

Antes de entrar, como siempre el ritual de quitarse los abrigos, zapatos y ponerse los calcetines preceptivos, no se puede pisar con calzado de la calle… (extraña costumbre que al final adoptaremos también, buena estrategia para limpiar menos)
Subimos a la primera planta, a la sala Matrioska (muñeca rusa), que es donde esta la pequeña. Zhanara (muy suelta en estas lindes y como en su casa) habla con las cuidadoras (2 por turno para 10 niños) y una de ellas sale con la niña…..

Algo indescriptible, se te agolpan un millar de sensaciones pero ante todo sientes una ternura inmensa hacia ese bebé tan pequeñito de 7 meses y medio que dejan en tus brazos (primero el papa, que luego no la quería soltar). La ves tan indefensa, tan extrañada ante esas dos personas tan diferentes a las que esta acostumbrada, pero a la vez se muestra interesada.
Nos estudia con sus inmensos ojos azules y se recuesta sobre nuestro pecho, como diciendo,” aquí me tenéis, necesito todo vuestro amor y estoy dispuesta a dejarme mimar”.
Ya nos ha ganado el corazón ahora tan solo hay que crear el lazo más fuerte que jamás haya existido, un invisible cordón umbilical que una nuestras vidas a la suya para siempre.

Fotos, fotos y más fotos y encima posa y pone caritas, pero si parece que se esta presentando ella sola a la familia y amigos…
La sesión dura poco, al fin y al cavo solo lleva unas horas de alta, y esta cansada.
El sábado por la mañana estaremos todo el tiempo que nos permitan.
Ni en nuestros mejores sueños hubiéramos imaginado un bebé y mucho menos de origen ruso, estábamos más preparados para una niña un poco más mayor y de rasgos mas asiáticos, así que nos ha sorprendido mucho, es un ángel, un regalo del cielo nuestra Nahia.

Al regresar a casa a descargar las fotos y preparar los correos para presentarla a toda la familia y amigos; realmente es una niña tan deseada…
Hemos tenido mucha suerte por ser tan apoyados en nuestro entorno.

3 comentarios:

Anabel dijo...

Me ha emocionado leer vuestro feliz encuentro con Nahia. Habéis sido unos luchadores y por fin vuestra entereza se ha visto recompensada.
Que seáis muy felices los tres.

Anabel

Anónimo dijo...

Hola Zaida y Patxi,

Qué alegría leeros por fin desde Kaz. Parecía que no iba a llegar nunca, pero al final ahí estáis los tres juntos... toda llega.
No puedo dejar de emocionarme al leer cualquiera de estas últimas entradas del blog. Estoy llorando como una tonta, parece que os estoy viendo...

Os deseamos todo lo mejor para los tres y que disfrutéis mucho estos momentos. Un beso muy fuerte para Nahia y para vosotros.

Mayte y Alfredo (desde Madrid)

aialmar dijo...

Querida Zaida:

Es increíble como los destinos se cumplen a pesar de las trabas y dificultades, pero sobre es conmovedor ver cómo el empeño de unos padres por reunirse con su hija ha sido el que lo ha logrado al fin. Habeis luchado como jabatos para llegar a Nahia, y ya teneis vuestra recompensa.
Me alegro mucho, de vuestra felicidad y de que por fin el camino se haya cumplido. Mucha suerte para el juicio y ojalá el tiempo que os falta para estar en casita, vuele.

aialmar