Nos levantamos a las 03:00 de la mañana, nunca nos ha costado menos levantarnos tan pronto, teníamos que estar antes de las 04:30 en el aeropuerto, nos levantamos con tiempo, no queríamos dejar nada a la improvisación: que hubiera problema con el taxi, recoger todo tranquilamente y el “por si acaso de siempre”.
Hora de salida del vuelo a las 06:30, empezamos mal, pagamos 120€ por exceso de equipaje y menos mal que sólo nos cobraron 5 kg de mas, de los 15 que llevábamos de sobrepeso y cuando estamos sentados en la sala de embarque sentimos los caprichos de la tormenta, truenos y relámpagos en el aeropuerto de Barajas, menos mal que aunque saliera con retraso, estaba todo previsto, contábamos con cuatro horas de margen hasta coger el otro vuelo a Astana.
Llegamos a Frankfurt y dio tiempo a todo: baño, visitas a los dutty free, comer algo, perderme y encontrarme (no detallo), fumar en las peceras, ponernos de los nervios, queríamos llegar ya, a tranquilizarnos, dio tiempo a todo, las primeras llamadas a la familia diciendo que estábamos bien; por fin partimos camino a Astana, nos esperaban 6 horas de comernos las uñas, para soñar, para preparar al corazón con lo que se le venía encima, para llorar de alegría porque ese avión nos llevaba a ver a nuestra niña, nuestra aventura, LA AVENTURA DE ZAIDA Y PATXI estaba empezando por fin después de 4 años.
Aterrizamos a las 23:00 h. hora local (4 horas menos en España), por fin llegamos, en esos momentos sólo pensamos en que no hubiera problemas con el control de maletas, nos habían dicho que solían abrir las maletas y encima nosotros llevábamos unas cuantas cosas peligrosas (lomo, chorizo, jamón), pero sería por la hora y que los kazajos a esas horas marmotan no nos abrieron nada.
Nos esperaban en la salida de embarque Zhanara (nuestras traductora de español, diccionario en mano, que no tiene ni idea pero lo intenta, menos mal que sabe ingles y Zaida también) y el chofer, un 4x4=16 kazajo con un peaso Mercedes con los cristales tintados que prometía bien.
Nos llevaron directamente a uno de los dos apartamentos que nos habían preparado, los dos están en una zona muy buena, en el centro de la capital, éste contaba con una habitación, un salón hermoso de unos 25m2, una cocina también bien hermosa con un amplio recibidor y un cuarto de baño, el otro según la traductora tenía 4 habitaciones y era de lujo, (para que cojones quería yo 4 habitaciones) y el precio también era de lujo, jajajaj, nos decidimos por este, nos estaba esperando la dueña de la casa, lo primero que nos hizo fue decirnos que nos descalzásemos que no se podía pisar las alfombras y como en toda la casa hay alfombras hasta en la cocina, pues a descalzarnos, llegamos a un acuerdo con relación precio y demás detalles y nos despedimos con el clásico Dosvidania o Paka, quedamos con la traductora para el día siguiente a las 10:00 a las ten o clock, mi ingles ésta siendo de alucine, la traductora se parte.
Eran ya cerca de la 12 de la noche y entre el cambio horario y que parecía que nos habíamos fumado algo raro, estábamos espidicos y nos pusimos tranquilamente a deshacer las maletas y ordenarlos en los armarios, como no habíamos cenado nada, cortamos un poquito de lomito y chorizito y así se va a la cama uno mejor ¿no?, jajajaj.
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